Los primeros trazos de esta vía surgieron durante el Imperio Inca, con los caminos del Inca. Como dice Fabio Montale en la novela Chourmo: «Lo esencial del chourmo es conocer gente. Puesto que una de mis pretensiones era acercarme a los paisajes físicos y humanos de estos lugares del continente americano, llegué a la conclusión de que trenes, autobuses y transbordadores son los medios de transporte más adecuados para ello.