Joan Carrillo permanece al mando del conjunto almeriensista durante 10 partidos en los que no consigue ninguna victoria, tras lo cual es destituido, haciéndose cargo del equipo Miguel Rivera de manera interina hasta la llegada del nuevo entrenador; Néstor Gorosito, un viejo pretendido por el expresidente Alfonso García que no terminó en la U.D. A pesar de demostrar valía para el puesto, a falta de 4 jornadas para el final y con el equipo rondando el descenso, Alfonso García toma nuevamente una sorpresiva decisión: destituye a su tan ansiado fichaje Néstor Gorosito, el cual, a la postre, criticaría de manera importante la gestión del presidente.